Pequeña historia del Cineclub Jorge Prelorán. En octubre de 1997, un grupo de entusiastas fundamos un cineclub en el seno de la Biblioteca Popular Osvaldo Bayer de Villa La Angostura, provincia de Neuquén.

Villa La Angostura nunca tuvo un cine estable, sí, algunas propuestas puntuales de proyección de películas a lo largo de su corta historia.

En aquellos primeros años funcionó gracias a la donación de un proyector de 16 mm Belle Howell de la familia Vairolatti. Surgieron ciclos completos de la Cinemateca Francesa y del Goethe Institut de Buenos Aires.

Cuando surgió la necesidad de ponerle un nombre, este recayó sobre el gran documentalista argentino Jorge Prelorán, en honor a sus increíbles etnohistorias que retratan la vida de los habitantes de nuestro país poniéndole énfasis a un relato propio y vivo, muy alejado de los documentales que lo hacen científicamente con una voz en off.

Así fue que le escribimos a don Jorge que en esos momentos era profesor en la UCLA de San Francisco, EEUU, contándole de nuestras experiencias por la cordillera patagónica ya que habíamos iniciado una serie de giras con un Cineambulante desde 1999 visitando escuelas rurales, bibliotecas populares, centro culturales y comunidades mapuche.

Al mes, el correo nos trajo una veintena de video cassettes de sus películas más renombradas con las cuales salimos al campo para difundirlas. Recorrimos desde Aluminé, en la provincia de Neuquén, hasta Lago Rosario en Chubut.

A todo esto se le suman los ciclos semanales de cine mundial y la creación del Encuentro de Cine de la Lluvia que va por su 10° edición.

También hace unos cuatro años llevamos al Festival Internacional de Cine de Concepción, Chile, una muestra del mejor cine patagónico. Hace dos años somos sede del Bafici itinerante y este año estrenamos la sede del FAB, el Festival Audiovisual de Bariloche.